La luz neutra (entorno a los 4000K) es la más parecida a la luz natural. Al igual que la luz fría, proporciona muy buenas condiciones de visibilidad y estimula nuestra capacidad de concentración.
Por ello, es una luz ideal para espacios en los que necesites ver con claridad y exactitud, como en la cocina o en los baños. Además, este tipo de luz quedará perfecta en combinación con encimeras de granito, azulejos y materiales similares.
Nuestro truco con la luz neutra es utilizarla en lámparas auxiliares cerca del sofá o la cama para crear zonas de lectura. De esta manera tendremos una iluminación adecuada y saludable para nuestros ojos sin alterar el ambiente general de la habitación.